El Acebuchal, conocido como la «aldea perdida» o el «pueblo fantasma», es un enclave único situado en el corazón del Parque Natural de las Sierras de Tejeda, Almijara y Alhama. Esta pequeña aldea, perteneciente al municipio de Cómpeta pero más cercana a Frigiliana, ha experimentado una historia fascinante de abandono y renacimiento que la convierte en un destino imperdible para los amantes del turismo rural y la naturaleza.
Historia de El Acebuchal: Del abandono al renacimiento
El Acebuchal fue fundado en el siglo XVII como un punto estratégico en la ruta de arrieros entre Granada y Málaga. Durante el reinado de Isabel II, en el siglo XIX, la aldea llegó a albergar hasta 100 habitantes, contando con ventas y un molino de aceite. Tras la Guerra Civil Española, El Acebuchal se convirtió en refugio de los maquis, guerrilleros antifranquistas que se ocultaban en las montañas circundantes. Esta situación llevó a que en 1948 la Guardia Civil ordenara el desalojo completo de la aldea, prohibiendo a sus habitantes regresar por la noche. Incapaces de mantener dos viviendas, los últimos residentes abandonaron El Acebuchal en 1949. Después de 50 años de abandono, en 1998, Antonio García ‘El Zumbo’ y Virtudes Sánchez iniciaron la titánica labor de reconstruir la aldea. Sin electricidad ni agua corriente hasta 2003, la familia García Sánchez logró devolver la vida a El Acebuchal, convirtiéndolo en un destino turístico único.
Cómo llegar a El Acebuchal
El Acebuchal se encuentra a unos 5 kilómetros de Frigiliana y pertenece al municipio de Cómpeta. Para llegar desde Málaga:
- Sigue la A7 hasta Nerja.
- Toma el desvío a Frigiliana.
- Desde el casco histórico de Frigiliana, sube hasta El Acebuchal.
Alternativamente (curvas):
- Toma la A7 hasta Algarrobo Costa.
- Desvíate hacia Cómpeta y luego baja hasta la aldea.
Ambas rutas toman aproximadamente una hora desde Málaga. El último tramo (5-6 km) es un carril de tierra que requiere precaución, especialmente en época de lluvias.
Qué ver en El Acebuchal
La aldea restaurada
El Acebuchal consta de unas 32 casas, la mayoría disponibles para alquiler turístico. Sus calles empedradas y casas blancas ofrecen un encanto único que transporta al visitante a otra época.
Restaurante El Acebuchal
Propiedad de la familia García Sánchez, ofrece comida tradicional. No te pierdas su pan cateto mojado en aceite y los postres artesanales. Es recomendable reservar con antelación.
Rutas de senderismo
El Acebuchal es un punto de partida ideal para varias rutas de senderismo:
- GR249 de la Gran Senda de Málaga
- Ruta a la Fábrica de la Luz de Pulido-Cómpeta (6 km)
- Ascenso al Cerro Lucero (1720 m)
Alojamiento en El Acebuchal
La aldea ofrece varias casas de alquiler vacacional, permitiendo a los visitantes sumergirse completamente en la experiencia rural. Estas casas combinan el encanto tradicional con comodidades modernas.
Mejor época para visitar
El Acebuchal es atractivo durante todo el año, pero la primavera y el otoño ofrecen temperaturas más agradables para el senderismo. En invierno, las rutas cercanas pueden presentar nieve, añadiendo un encanto especial al paisaje.
Consejos para tu visita
- Llega temprano (antes de las 10:30) para asegurar aparcamiento.
- Reserva con antelación si planeas comer en el restaurante.
- Lleva calzado cómodo para caminar por las calles empedradas y las rutas de senderismo.
- No hay cobertura móvil en la aldea, lo que permite una desconexión total.
El Acebuchal es mucho más que una simple aldea recuperada. Es un testimonio de resiliencia, un museo vivo de la historia reciente de España y un ejemplo de cómo el turismo sostenible puede revivir lugares olvidados. Su ubicación privilegiada en el Parque Natural, combinada con su fascinante historia y la calidez de sus actuales habitantes, hacen de El Acebuchal un destino único que merece ser descubierto y apreciado.Ya sea que busques una escapada tranquila, una base para el senderismo o simplemente quieras sumergirte en la historia y la naturaleza de la Axarquía malagueña, El Acebuchal te ofrece una experiencia inolvidable. No pierdas la oportunidad de visitar este rincón mágico de Málaga y ser parte de su continua historia de renacimiento y preservación.